El Último Suspiro del Colón Salvadoreño

Por Carlos Quintanilla, miembro de ANUCA

Parte I - Un Poco de Historia
Parte II - El Nacimiento del Colón
Parte III - Los Tiempos Modernos
Parte IV - El Último Suspiro

El Nacimiento del Colón

Cerca de 10 años tuvieron que pasar para que la ley de 1883 tomara vida. El 29 de abril de 1891 un decreto legislativo concedió el privilegio de producir monedas a Don Enrique Arbizú, quien lo transfirió al Sindicat General des Monnais de Paris, quien nuevamente transfirió los derechos a The Central American Mint, Limited of London. Esta firma llegó a ser conocida como la Casa de Moneda o Casa Nacional de Moneda de El Salvador. Fue ubicada en las instalaciones de lo que hoy es la Imprenta Nacional de El Salvador en el centro de la Capital.

La inauguración de la casa de moneda tuvo lugar el 28 de agosto de 1892, y fue atendida por el Presidente de la República, el vicepresidente y otros oficiales del gobierno. Después de los discursos, la maquinaria fue operada por un momento y produjo unas pocas piezas de plata y cobre para el público [2].

La Casa de Moneda de El Salvador emitió monedas en las denominaciones de un centavo en cobre, cinco, diez, veinte, cincuenta centavos y Un Peso en plata y dos y medio, cinco, diez y veinte pesos en Oro. Las monedas producidas cumplían con las especificaciones de la ley de 1883 en cuanto a contenido y diseño de las mismas.

Poco tiempo después, para conmemorar el IV Centenario del Descubrimiento de América, por decreto legislativo del primero de octubre de 1892 el diseño de la moneda de un peso fue alterado. En lugar de mostrar la bandera nacional, se colocó la efigie del famoso explorador español Cristóbal Colón; así mismo, la moneda de cincuenta centavos fue afectada con el mismo cambio. Además la moneda salvadoreña fue bautizada con un nuevo nombre: El Colón.

Es de hacer notar que, aunque el nombre legal de la moneda salvadoreña a partir de ese momento era "Colón", las monedas siguieron llevando la denominación “Peso”, quizá para evitar confusiones en las transacciones diarias en los mercados internacionales.


Monedas de 1 Peso, 1892.
Figura 2. Cambios generados en el diseño de las monedas de un peso en 1892.

Pero este hecho no es exclusivamente del ámbito de las monedas. Los bancos particulares, que estaban autorizados a emitir papel moneda, siguieron utilizando la denominación "Peso" en sus billetes, aunque algunos llevaban la efigie del almirante en sus diseños. La denominación de Colón se comenzó a utilizar en los billetes a partir de los años 20. Ver figura 3.

Billetes de Peso y Colón.
Figura 3. Billetes del Banco de Centro América y Londres (189X), Banco Industrial de El Salvador (1896) con denominación en PESOS.

La corta vida de la Casa de Moneda de El Salvador llegó a su fin en 1896. Debido a sus altos costos de producción, el acuñar monedas localmente resultó ser un mal negocio para el gobierno salvadoreño, el cual finalizó el contrato con la compañía en ese año, suspendió todo proyecto de acuñación local, algún equipo fue vendido y el edificio fue ocupado por la Imprenta Nacional.

La producción posterior de monedas de un peso plata fue realizada por diversas casas de monedas en Europa y Estados Unidos hasta el año de 1914. Estas seguían llevando la denominación de Peso y las siglas CAM (de Central American Mint). A partir de esta fecha salvo pocas excepciones, la acuñación de monedas en la denominación de un Peso o Colón entro en una larga pausa.

Un Peso - 1914.
Figura 4. Última moneda de un Peso en plata acuñada en cecas europeas y de los Estados Unidos en 1914.


Parte III - Los tiempos modernos. >>

[2] Se cree que el origen del Piedfort de la moneda de un peso de 1892, con el diseño de bandera, es éste; es decir, fueron acuñadas para el público presente en la inauguración de la Casa de Moneda de El Salvador. Esta moneda es casi el doble de espesor de la moneda normal y es conocida localmente como "la llanta"